The Hunt

Recuerdo mi tierna juventud mirando en la tele documentales de animales. Dos nombres saltan a mi cabeza. El primero, Felix Rodríguez de la Fuente, aquel documentalista de la naturaleza con voz ibérica que era un ídolo, y su repentina muerte le convirtió en mito. Nos mostraba las especies animales que habitaban en la península ibérica, algunas en serio peligro de extinción. El otro nombre era David Attenborough. De él y de su último trabajo vengo a hablaros hoy.

David Attenborough es un naturalista londinense de extensa carrera (de hecho, tiene 90 castañas ya). Cuando la televisión española emitía un documental de este señor se aseguraba de que quedara claro que era "un documental de la BBC, dirigido (o realizado o presentado) por David Attenborough". Esta simple afirmación servía para que subieras el volumen y apartases las palomitas: la calidad estaba asegurada.

 

David Attenborough (www.radiotimes.com)

Ahora lo ha vuetlo a hacer. La BBC está emitiendo una serie titulada "The Hunt" ("La caza") que nos enseña las diferentes técnicas de caza empleadas por todo tipo de especies, desde las más grandes y feroces como las orcas, las ballenas o tigres, hasta las más diminutas como arañas y hormigas. El programa es escalofriante. Nos muestra una naturaleza continuamente expuesta al peligro, donde presa y depredador son el mismo ser. Las técnicas de caza abarcan desde la rústica carrera (aquí te trinco aquí te hinco el diente) hasta las más sofisticadas que implican mimetismo, engaño y oportunismo. Pero lo más curioso es la sensibilidad con la que el programa nos enseña unas acciones tan violentas y vertiginosas. Si tenéis la oportunidad de verlo en España, os lo recomiendo fervientemente. ¿Por qué? Porque es un programa de David Attenborough.

Creo que está disponible on line en la página web de la BBC, concretamente en este enlace podéis encontrar los cuatro programas emitidos hasta el día de hoy (aunque quizás no esté disponible fuera de las islas). Disfrutad.

La noche de Guy Fawkes

El fin de semana del 6-9 de noviembre nuestros gatos andaron un poco acojonadillos. Fuegos artificiales sobrevolaron el cielo de Inglaterra y esto, para los gatos, es como para los galos de Astérix que "el cielo caiga sobre sus cabezas". Temor total. El motivo de este escándalo pirotécnico es la celebración de la noche de Guy Fawkes o la noche de las hogueras.

En 1605 Inglaterra es gobernada por el protestante Jacobo I, que a su vez reinó en Escocia como Jacobo IV. Las lecturas en internet acerca de su reinado destacan su absolutismo y amor por la corrupción y favoritismo a sus amiguetes (se comenta que tuvo la idea de construir un aeropuerto en Castellón...) y un continúo enfrentamiento con los parlamentarios. Pero por otro lado, también se subraya la capacidad de Jacobo I de mantener la paz política en sus dos reinos. Sea como fuese, a alguien le pareció que Jacobo I no merecía el reinado y planeó un ambicioso atentado. Este hecho pasó a la historia como la Conspiración de la Pólvora.

El 5 de noviembre de 1605 fue el día elegido para volar las Casas del Parlamento y eliminar al rey y a su familia, promoviendo la subida al trono de un rey católico. El plan consistió en llenar el sótano del Parlamento de pólvora y hacerlo explotar a la llegada del rey. Pero algo debió torcerse y antes del día elegido para la masacre los terroristas fueron apresados y ajusticiados. Uno de ellos, Guy Fawkes, cedió su nombre a la celebración de la efeméride del fallido atentado. 

Cada 5 de noviembre los cielos de Inglaterra se llenan de fuegos artificiales.. En los campos se encienden hogueras enormes y se queman figuras que en los primeros años simbolizaban a Guy Fawkes, pero que en los últimos tiempos ha sido sustituidas por otros personajes de actualidad política. Y los gatos se asustan.

All Blacks total

Estáis locos si pensáis que me había olvidado contaros lo que ocurrió en la final del mundial de rugby. Después de un mes dando la chapa con el tema, la final resultó ser nuevamente un magnífico espectáculo. Los All Blacks validaron todos los adjetivos que los han definido a lo largo del campeonato consiguiendo la victoria en una gran final. Los neozelandeses se convierten en el primer país en ganar tres veces el mundial y su capitán, Richie McCaw, en el primer jugador en levantar el trofeo dos veces seguidas.

(Imagen de cnn.com)

La magia de los All Blacks ha consistido en no renunciar al espectáculo para ganar todos los partidos. Así fue en la final, donde jugadores como Dan Carter (nombrado jugador del año 2015) o Ma´a Nonu ofrecieron la mejor versión de este deporte. Australia no perdió la cara al partido e intentó aprovechar la inferioridad numérica de los oceánicos en la segunda parte, consiguiendo dos ensayos consecutivos que les metieron en el partido. Pero Nueva Zelanda volvió a poner las cosas en orden para dejar el marcador en un contundente 34-17.

Honrando la copa Webb Ellis con la temible Haka (imagen de planetrugby.com)

La prensa ha calificado este mundial como el mejor de todos los tiempos. Las audiencias han sido masivas, las asistencias a los estadios magníficas. La globalización ha llegado el rugby y en 2019 será Japón el país organizador. Como ya conté en un post anterior, los japoneses ofrecieron al mundo la gran sorpresa del mundial al vencer a Sudáfrica en el partido inaugural y ser la primera selección de la historia en quedar eliminada a pesar de conseguir tres victorias.

La belleza del rugby sobrepasa las barreras del estadio. Es un deporte envuelto en bellas tradiciones y gobernado por valores muy sólidos. Como los que demostraron algunos jugadores neozelandeses. Tras ganar el trofeo, su primera visita fuera de las obligadas y oficiales fue a la tumba de su ex compañero Jerry Collins, fallecido en accidente de coche el pasado junio.

¡Viajeros al tren!

Para viajar a Londres era necesario coger un autobús desde nuestro pueblín de Kidlington hasta Oxford, y aquí tomar el bus o tren a Londres. Este recorrido extra suponía sumar unos largos 45 minutos a nuestro viaje. Pero... ¡se acabó! ya que

Si amiguitos, nos han abierto una nueva estación de tren como bien dice en está publicitaria imagen cortesía de Chiltern Railways, que supongo que debe ser la empresa concesionaria a tenor del coñazo publicitario que nos han dado. La estación está en nuestras mismísimas narices, a cinco minutos en bici y algo más andando. Una de las líneas que ya circulan por está estación conecta con Londres, concretamente con la estación de Marylebone, que más o menos viene a estar en Baker Street, muy cerquita de Regent´s Park y del Soho. Una horita aproximadamente para llegar a la capital del imperio.

Así que ya no va a hacer falta tener que ir a la ciudad universitaria cuando queramos ir a Camdem, al National Gallery o ver jugar al West Ham United. ¡Viva!