jueves, 29 de enero de 2015

Reivindicación

¡Ya está bien! ¡Ha llegado el momento en que he explotado! Los comentarios que llegan del exterior de las islas acerca de la comida británica  nos duelen. Es cierto que la cuestión del suministros de nutrientes está algo más limitada que en España. También es cierto que en este país son capaces de alimentarse de auténtica bazofia. Pero se pueden encontrar ciertos productos de mucha calidad y comidas deliciosas. No hay más que buscar. Aquí recopilo algunos ejemplos de delicatessen que he encontrado:

1. Leche. Parece un producto demasiado básico para ser excepcional. Pero lo es. En España estamos acostumbrados a la leche de brick desde que se prohibió vender la leche a granel. La leche de brick tiene la muy cuestionable característica de tardar en caducar varios meses, algo que a mi me parece "anti natura". Los más sibaritas compran leche fresca, que es leche embotellada de mayor calidad. Pues bien, en UK se consume leche fresca en grandes cantidades, con un sabor estupendo. Y no es muy cara.

2. Las galletas y los cakes. Tomar un té solitario debería estar prohibido, por eso debe acompañarse con un festín de galletas, tartas o pasteles que están riquísimos. La carrot cake o tarta de zanahoria es un manjar.

3. El asado de los domingos. La cumbre de la cocina británica. Los domingos es costumbre cocinar asado. Hay varias opciones: cerdo, ternera, pollo o cordero. Lo he comido en varios restaurantes y de distintas carnes y siempre lo encuentro buenísimo. Se sirve con guisantes, puré de patatas y gravy, que es salsa preparada con el jugo del propio asado.

4. Las salchichas. No me refiero al paquete de seis salchichas jumbo que compras en el Carrefour. Parece una comida menor, pero os aseguró que si son buenas la diferencia con lo que conocemos en España es abismal. Me encantan.

5. El pan. Hay un pan riquísimo, además de una gran variedad. Incluso si hablamos del pan del molde. Es una cosa que no entiendo muy bien porqué no comen pan en las comidas...

En cualquier caso, esta reivindicación no es más que un pataleo por mi parte. No puede enmascarar la auténtica verdad que se encuentra encerrada en una sentencia cosecha de mi madre: "¿Tú has visto en algún lugar del mundo un restaurante inglés?" Por algo será.

miércoles, 28 de enero de 2015

Los 96 de Hillsborough (3)

La ciudad de Liverpool posee dos equipos en la máxima categoría del fútbol británico: los Reds del Liverpood FC y los Toffes del Everton FC. Los estadios se encuentran separados por la milla que mide Stanley Park. Siempre han sido rivales, la ciudad está deportivamente dividida pero la vida va más allá que el fútbol. El orgullo de la ciudad es común entre ambas aficiones, por eso el Everton sintió como propia la tragedia de Hillsborough


Marcador en Goodison Park, estadio del Everton.


Minuto de silencio en Goodison Park.


Los Toffes en contra de The Sun.


Camiseta del Everton en homenaje a las víctimas.

Los aficionados del Liverpool agradecen a los Toffes el apoyo a los 96 de Hillsborough. 

Todo el tema de Hillsborough me resulta muy emocionante. Vivirlo de cerca en Anfield, entrar en la sede de la HSFG, presentar mis respetos en el memorial de Anfield... los 96 siempre están presentes en la ciudad del Mersey.

martes, 27 de enero de 2015

Los 96 de Hillsborough (2)

Lo prometido es deuda. Aquí van unas fotos del tema de Hillsborough. Mañana saldrá otra entrada asociada que hablará de la que quizás sea la parte más amable de este triste capítulo de la historia del fútbol británico.


El día del desastre.


La portada de The Sun de 1989 y la de las disculpas en 2012. Impresionante las palabras de disculpas: We are profoundly sorry for false reports (Sentimos profundamente los falsos reportajes).


Homenaje en el estadio de Anfield.


En Anfield nunca han dejado de luchar. 


El memorial en Anfield Road, donde los visitantes dejan la bufanda de su equipo en recuerdo de las víctimas.


Nunca más.


Y algunos enlaces:


The Guardian 07-07-2004: What the Sun said 15 years ago

Asociaón de Familiares de Hillsborough: Hillsborough Family Support Group

lunes, 26 de enero de 2015

Los 96 de Hillsborough

La entrada sobre la prensa finalizaba con una leve descripción del divorcio entre la ciudad de Liverpool y el periódico The Sun. Mi cuñada periodista me ha dado una generosa tabarra para que explique este desamor y a ello voy. Es una larga historia con varias fotos, así que la he dividido en tres entradas. Espero no aburriros.

En 1989 el fútbol británico estaba en un periodo oscuro de su historia. El fenómeno hooligan se encontraba en pleno apogeo, la violencia estaba presente cada fin de semana y los clubes de las islas cumplían la sanción de seis años impuesta por la UEFA por la tragedia del estadio de Heysel en 1986. En Downing Street moraba la Dama del corazón de Hierro, Margareth Thatcher. Además de su dudosa gestión en el asunto de Irlanda del Norte, cerrar fábricas, privatizar servicios y recortar los derechos de los trabajadores (menos lo de Irlanda, el resto me resulta familiar), intentó en vano aniquilar el fútbol de las islas bajo el argumento de la violencia. Pero no pudo porque en UK el fútbol es sagrado. Cabe resaltar en este punto que cuando Thatcher falleció en 2013 no se guardó minuto de silencio en ningún estadio de fútbol británico... creo que esto lo dice todo.

El 15 de abril de 1989 se iba a disputar el partido de semifinales de la Copa de Inglaterra en el estadio de Hillsborough, Sheffield, entre el Liverpool y el Nottingham Forest. Se produjo una avalancha en la zona de aficionados Reds que causó el fallecimiento de 96 personas, algunas de ellas niños. El acontecimiento conmocionó las islas y sus consecuencias se alargaron hasta nuestros días. 

La investigación llevada a cabo por la policía señaló como únicos culpables a los aficionados del Liverpool. La huella de Heysel estaba fresca y era lo más sencillo y esperado por todos... menos por los que estuvieron allí. Aquí entra en juego el infame The Sun. Con su estilo particular, elevó la mezquindad de los aficionados Reds a la enésima potencia afirmando que no solo habían originado el desastre, sino que también habían orinado sobre los policías, saqueado sus cuerpos y mofado de los cuerpos sanitarios que intentaban reanimar a los heridos. 

Pero los familiares de las víctimas no se quedaron de brazos cruzados. Constituyeron una asociación que luchó incesántemente desde aquel abril por encontrar la verdad, apoyada por todos los aficionados y el mundo del fútbol en general. Su lucha se vió recompensada cuando en el año 2012 la desclasificación de los documentos de la investigación oficial llevó a una comisión independiente a concluir que los responsables de la masacre fueron la policía y el jefe de seguridad del estadio, negligentes hasta las nalgas. La clasificación de esos documentos se realizó, por supuesto, bajo las órdenes de Thatcher.

David Cameron, primer ministro británico, pidió disculpas públicamente en el Parlamento en septiembre de 2012. Kelvin McKenzie, editor del panfleto en 1989, también. El tabloide intentó disculpar lo inexcusable con una portada que desmentía todas las mentiras que contaron tras la tragedia. Pero evidentemente no hay perdón, nadie puede recuperar a los fallecidos ni olvidar con facilidad todas las mentiras que han nublado sus recuerdos. No solo el entorno del Liverpool FC, sino toda la ciudad del Mersey estaba herida.

Mañana continúa la historia. Y recordad, si veis una página de The Sun por el suelo, recogedla con una bolsa de pipican.

jueves, 22 de enero de 2015

Winston Churchill

Winston Churchill es un personaje de sobra conocido. No voy a descubrir en esta entrada a un personaje anónimo con un breve momento de gloria sino a alguien con una extensa trayectoria militar y política. Este año se cumple el cincuenta aniversario del fallecimiento de Churchill, acontecimiento que será conmemorado con la emisión de sellos, monedas y la celebración de diversos actos. 

La dimensión de Winston Churchill no conoce límites. Fue galardonado con Premio Nobel de Literatura en 1953 por "su dominio de las descripciones biográficas e históricas así como por su brillante oratoria en defensa de los valores humanos exaltados". Además, es ciudadano honorario de los Estados Unidos, donde se inauguró en 1969 el Winston Churchill Museum en Fulton, Missouri. 

Tras una juventud rebelde, inició una carrera militar que fue tempranamente sustituida por su vocación política. A los 26 años ya representaba a su partido en la Cámara de los Comunes. Tras un período alejado de la política, dedicado a la escritura y la pintura, regresó con fuerza para liderar a su país en la Segunda Guerra Mundial. La alta emoción contenida en sus discursos y su extraordinaria capacidad como estratega fue clave para el desenlace de la contienda. Sus arengas y proclamas hacia la población consiguieron mantener a la población fuerte en los momentos más complicados e hicieron eterno a Churchill.

Lo que me era desconocido en la biografía de el ex Primer Ministro era su lugar de nacimiento: el Palacio de Blenheim, en Woodstock, localidad vecina de nuestra Kidlington de adopción. Se trata del único palacio que recibe esta denominación sin pertenecer a la casa real o a la iglesia. Una magnífica construcción levantada en un entorno natural no menos esplendoroso. Pertenece desde hace varias generaciones a los Duques de Marlborough, quienes gracias de su incapacidad para mantener las instalaciones han tenido que ir vendiendo poco a poco parte del tesoro, en forma de objetos, libros y obras pictóricas para poder cubrir las necesidades del palacio. Una cara maravilla.

La web del Palacio de Blenheim

La web del Winston Churchill Museum

martes, 20 de enero de 2015

Terapia en Kidlington

Nos gustan las visitas, mucho. Estas navidades hemos recibido a los primeros valientes; la familia Pimiento, en visitar el desconocido Kidlington y poco a poco se van programando más visitas para 2015. En estos momentos, mientras aporreo las teclas del ordenador, nos acompaña nuestra amiga Elena. El hecho de venir a visitarnos es doblemente agradecido. En primer lugar porque me ha traído un ejemplar de "Crónicas Birmanas", un cómic autobiográfico de Guy Delisle que narra sus vivencias en Rangún, la capital birmana. En segundo lugar, por su proclamado temor a los gatos.

Sus propias palabras definían sus sentimientos ante los felinos como "miedo extremo, pánico, sudores fríos". Creo que estas palabras os dan una idea clara del pavor atroz que los gatunos producían en Elena. Pero un par de días aquí han servido para voltear está situación. Ha aceptado un rol en la manada de Kidlington y ha interaccionado de manera directa y completa con los dueños de este hogar, especialmente con Leo.

Entiendo que los más cercanos a Elena no se crean lo que aquí cuento. Pues hala, aquí la muestra gráfica en plena sesión terapeútica entre Leo y Elena:




Otra prueba de lo acogedora que es nuestra familia. Los británicos somos muy buenos anfitriones.

viernes, 16 de enero de 2015

Fútbol en el college

Cualquier sitio es bueno, solo tienes que plantar dos porterías porque el césped ya viene de serie. 


Campos de fútbol en los jardínes del Christ Church College.

jueves, 15 de enero de 2015

Por fin...

Después de tanto buscar ya he encontrado una ocupación mañanera: un trabajo de media jornada en un almacén de componentes electrónicos de una empresa de venta por internet. La verdad es que no es un trabajo definitivo, pero me viene bien el horario y se encuentra cerca de casa. Los productos son muy variados: desde cables, adaptadores y clavijas hasta todo tipos de accesorios para cigarrillos electrónicos.

El tema es muy sencillo: consiste en satisfacer las demandas de los usuarios. Por ejemplo, un señor de Helsinki quiere sentir el sabor de la alcachofa cuando fuma su cigarrillo electrónico, pues ahí estoy yo para meter en un sobre una recarga de alcachofa y poner la pegatina de paquete internacional para enviarlo a la fría capital de Finlandia. En pocos días el señor observará por su escarchada ventana caer los copos de nieve sobre una manada de renos entre el humo alcachofil. Todos felices.

La empresa es una empresa que yo calificaría como "modernilla": todo automatizado, con walky talkies, un supervisor virtual, el tiempo controlado para cada actividad... Para que os hagáis una idea, me contabilizan cada día cuanto tiempo tardo en hacer cada pedido y cuanto me queda para llegar al tiempo óptimo. "La media de hoy es 45 segundos por pedido, tienes que estar entre 30 y 40 segundos". Pensaréis que esto es un agobio, pero no es así cuando te lo pasas por el forro. Cuando mi supervisora me cuanta alguna cosa de esas le respondo "Yes, yes". Y de nuevo todos felices.

martes, 13 de enero de 2015

Deporte de caballeros

El rugby es uno de los deportes más maravillosos que existen. Hay una  famosa frase que dice que "el fútbol es un deporte de caballeros jugado por villanos y el rugby es un juego de villanos jugado por caballeros". No voy a discutir la primera parte de la sentencia, pero cualquier aficionado o espectador accidental de un partido de rugby puede corroborar la segunda. 

Hace algunas semanas un jugador de rugby escribió una carta al jugador del Real Madrid Cristiano Ronaldo. El portugués declaró tras las duras entradas de un partido que "en lugar de fútbol parecía rugby". Fermín de la Calle, autor de la misiva, ensalza los valores del deporte del balón ovalado, su nobleza, su compañerismo y solidaridad. Y así es en la realidad. Parece mentira que en un deporte en que el elevado ritmo cardiaco se sirve con una buena ensalada de durísimos golpes gobiernen los valores deportivos más exquisitos. Pero evidentemente, siempre hay casos excepcionales.

El pasado mes de octubre, durante el enfrentamiento de la Super Liga inglesa entre los Wigan Warriors y el St Helens se produjo un hecho lamentable. El jugador del Wigan, Ben Flower, realizó una brutal agresión sobre el jugador rival Lance Hohaia, al que dejó inconsciente tras dos brutales puñetazos. 

Ben Flower en plena ida de pinza

El mundo del rugby y del deporte en general condenaron los hechos. Ben Flower y su club emitieron un comunicado de disculpa, pero la Federación Inglesa de Rugby (RFL) no titubeó en sancionar a Flower con seis meses de inhabilitación. La agresión fue considerada de grado F, el más alto nivel de gravedad. Incluso se rumoreó sobre la posibilidad de que el acto fuese investigado por la policía y que el agresor pudiese acabar con sus huesos en prisión.

Aunque la sanción oficial es la de la federación, no cabe duda de que la carrera de Flower estará marcada por aquel partido. En el mundo del rugby no se admiten este tipo de actos porque siempre ha sido un deporte jugado por caballeros.

El vídeo

La carta

jueves, 8 de enero de 2015

La prensa

Tengo mucho tiempo libre. Trabajo solo por las tardes-noches (más o menos es lo que aquí llaman evenings). Así que me he tenido que buscar varias ocupaciones mientras no me consiga un trabajo o se desatasque mi puesto de voluntario que se retrasa por tiempo indefinido por causas de fuerza mayor.

Entre las aficiones que me he buscado se encuentra acudir a la biblioteca municipal de Kidlington a leer la prensa. Cada día traen cuatro periódicos que nos disputamos unos jubiletas, un parado y yo mismo. Ellos son profesionales, madrugan y se saben todas las tretas así que yo siempre leo lo que ellos van dejando. Leer los periódicos me aporta mucho conocimiento de los problemas y preocupaciones de estas islas. Me apetece acudir a las mañanas a la biblioteca y el reto de vencer a mis rivales lectores me motiva.

Paralelamente a esta actividad, cuando voy a comprar al supermercado me detengo siempre en la estantería de la prensa a echar una ojeada. A través de estas dos actividades me he hecho una idea sobre la catadura de cada diario. Así he establecido una distinción entre "periódicos serios" (a partir de ahora serios) y "periódicos que no valen un penique" (a partir de ahora los llamaré penny), aunque debo advertir que nunca he sido un experto en el género periodístico. En el primer grupo tenemos a The Times, The Independent, The Daily Telegraph y The Guardian; en el segundo The Sun, Daily Express, Daily Mirror y Daily Star.

Lo primero que he identificado es que los "serios", que son los que suelen llevar a la biblioteca, comparten tema de portada cuando ha ocurrido algo realmente importante, lo cual resulta bastante lógico. Por ejemplo, si el día anterior se ha debatido alguna relevante ley en el parlamento, todas las portadas de este grupo de diarios coinciden en el tema principal, mientras que los "penny" abren con cualquier noticia basura, morbosa o ridícula.

La otra diferencia es el trato de la noticia. Los "serios" intentan ser rigurosos y directos (aunque supongo que barren hacia su tendencia política), mientras que los "penny" presentan su apestoso estilo peculiar. Por ejemplo, si en portada hablan de una violación en la que agresor y víctima se conocían no esperes un titular del tipo "VIOLACIÓN EN EL PARKING DE TAL SITIO", sino que empezarán con letras muy llamativas con un "¡SE CONOCÍAN!" que no te orienta en absoluto sobre el asunto de la noticia. 

Los "penny" son una auténtica mierda. Cada semana remueven el tema de Madeleine Maccan, presentan en portada pivones del famoseo más casposo o acuestan a futbolistas o políticos con fulanillas vestidas de Primark. Aunque el premio gordo de este grupo se lo lleva The Sun, no envolvería con su papel ni los vasos en una mudanza. Algún día me animaré y os contaré porque en muchos quioscos de Liverpool ponen un cartel que dice "Vendemos prensa. No vendemos The Sun". Tiene tela.

martes, 6 de enero de 2015

Londres

Oxford se encuentra a unas cincuenta millas de Londres, la gran capital del imperio. Mucho me han contado, he leído o visto en internet acerca de esta ciudad. La última opinión que me llegó fue de una chica española que se mudó desde Londres a Oxford: "Londres es el infierno". Esta opinión es muy común entre personas que llevan viviendo un tiempo relativamente largo allí. Londres agota. Es carísima, está muy cargada y la competencia es máxima. Pero cuando acudes como turista cambia mucho la cosa. Londres mola. Nuestra visita fue fugaz como un relámpago, un sólo día y regreso a casa. Nos hicimos una ruta y vimos muy por encima varias de las maravillas de la ciudad. Así poco puedes ver, pero no había otra posibilidad.

Hay muchos lugares impresionantes en Londres. Los típicos puntos de interés señalados en cualquier guía turística tienen un prestigio justamente ganado a base de historia, personalidad y belleza. A mi me impacto mucho el Monumento de la Batalla de Inglaterra, una escultura de venticinco metros de largo realizada en bronce y granito con desgarradora personalidad. Se encuentra a la rivera del río Tamesis en Victoria Embankment. Su autor, Paul Day, es un célebre escultor británico. Cuenta con varias obras repartidas por la ciudad y en otras ciudades europeas, como Bruselas. En su página web (www.pauldaysculpture.com) se puede encontrar información acerca de su obra y biografía.

Pequeña parte del Monumento a la Batalla de Inglaterra

jueves, 1 de enero de 2015

La navidad del exiliado

Pues ya estamos en plena Navidad. Me refiero al periodo que abarca desde nochebuena hasta Reyes obviando que Navidad es sólo un día, el 25 de diciembre, creo que es algo común ampliar el término. Ocurre lo mismo con el invierno que, aunque oficialmente comienza el 22 de diciembre, vulgarmente comienza el día que empezamos a sentir más frío que al sentarte en el water de un iglú.

Siempre he sido un renegado de la Navidad. Ni he sido nunca religioso ni me han gustado los convencionalismos. Las obligaciones del tipo "en tal fecha hay que hacer tal cosa" porque se lleva haciendo la torta de años me resultan prescindibles. Hay que hacer las cosas que te hagan felices. Y a mi siempre me lo ha proporcionado las reuniones familiares porque tengo la suerte de tener una familia amiga del cachondeo. En las veladas de mi familia siempre nos acabamos haciendo risa encima. Pero este año no va a poder ser. 

Es la cara dura del exiliado. Es la principal ausencia en tu vida en otro país. Si piensas en ello pasas por dos estados sentimentales, según tengas el día. El primero enfado, ¿quién tiene la culpa de que tú no puedas disfrutar de ello? Hay que ser comprensivo y dar por hecho que la culpa es toda nuestra: si pones a unos inútiles a dirigir la nave, posiblemente se estrelle. Así que mientras haya inútiles al mando continuarán separándose familias por miles de kilómetros. Compadezco a los inútiles que nunca sabrán que son esos sentimientos.

Luego están los días chungos. Miras por la ventana y llueve. Ves la tele y hablan raro. El Liverpool ha perdido... todo terrible. En esos instantes gobierna la nostalgia. Pero hay que ser fuerte y no caer en el abismo de la tristeza, ese por cuyo borde hacemos equilibrismo todos los degradados laborales y sociales que la España de los toros, los sobres, la realeza mafiosa y los bancos rescatados han obligado a escapar. Ese abismo que no existe para los inútiles al que dimos el mando de las naves y están volando en su mundo de nubes de fresa.

Para todos, exiliados, familiares, los que tenéis la suerte de estar juntos, amigos, lectores y curiosos de este blog, incluso para los pobres inútiles: FELIZ NAVIDAD.